LAS TERTULIAS
LAS TERTULIAS
Estamos en el tercer centenario del nacimiento del actor y
dramaturgo británico David Garrick, una de las principales figuras del teatro
inglés del siglo XVIII. Garrick empezó estudiando derecho y literatura junto a
Samuel Johnson antes de decidir probar suerte en Londres en 1737. Se volcó en
el teatro y debutó en 1741 en la obra Ricardo III de William Shakespeare, que
fue su éxito más resonante. Es también autor de una cuarentena de obras de
teatro, entre las que se encuentra su farsa mitológica Lethe. Murió en 1779 y está
enterrado en la abadía de Westminster. Pero, contra lo que pudiera pensarse a
primera vista el exitoso actor y director… no era feliz. El poema "Reír
Llorando" del escritor mexicano Juan de Dios Peza está inspirado en él. ¿Lo
recuerda?
Viendo a Garrick —actor de la Inglaterra—
el pueblo al aplaudirlo le decía:
«Eres el más gracioso de la tierra
y el más feliz...»
Y el cómico
reía.
Víctimas del spleen, los altos lores,
en sus noches más negras y pesadas,
iban a ver al rey de los actores
y cambiaban su spleen en carcajadas.
Una vez, ante un médico famoso,
llegose un hombre de mirar sombrío:
«Sufro —le dijo—, un mal tan espantoso
como esta palidez del rostro mío.
»Nada me causa encanto ni atractivo;
no me importan mi nombre ni mi suerte
en un eterno spleen muriendo vivo,
y es mi única ilusión, la de la muerte».
—¿De vuestra vida actual, tenéis testigos?
—Sí, mas no dejo que me impongan yugos;
yo les llamo a los muertos mis amigos;
y les llamo a los vivos mis verdugos.
—Me deja —agrega el médico— perplejo
vuestro mal y no debo acobardaros;
Tomad hoy por receta este consejo:
sólo viendo a Garrick, podréis curaros.
— ¿A Garrick?
—Sí, a Garrick... La más remisa
y austera sociedad le busca ansiosa;
todo aquél que lo ve, muere de risa:
tiene una gracia artística asombrosa.
—¿Y a mí, me hará reír?
—¡Ah!, sí, os lo juro,
él sí y nadie más que él; mas... ¿qué os inquieta?
—Así —dijo el enfermo— no me curo;
¡Yo soy Garrik!... Cambiadme la receta.
Quizás usted haya escuchado en la radio o leído en este
Boletín informativo el programa mensual anunciando los temas de las Tertulias
cuyo nombre oficial es: “Caminando por las calles de San Miguel de Allende”.
Éste surgió como tantas cosas buenas que tenemos al alcance y que nos hace
tanto bien al espíritu, en una plática. A Toño y Chucho (Luis Antonio López
Torres y Jesús Rodríguez Morales “Romotur”) se les ocurrió invitar a otros
amigos para comentar “cosas y casos de San Miguel”. Acudieron, aprendieron y el
grupo creció.
Ambos laboran en la Biblioteca Municipal de la calle de Pepe
Llanos en algún momento de hace casi cinco años, hablando de lo mucho que nos
tienen que contar “esas calles de Dios” hicieron un espacio y compartieron lo
que cada quien sabía. El grupo seguía disfrutando y como la mejor propaganda es
la de boca en boca fue necesario pasar a otro espacio más grande, darle una
cierta organización a la reunión y hasta darle un nombre, así surgió “Caminando
por las calles de San Miguel de Allende”. Sí, es una caminata virtual pero cada
quien sabe algo de la historia de nuestra ciudad y es muy grato encontrarle las
piezas faltantes a nuestro rompecabezas o atar nudos a nuestros hilos sueltos.
Así que empezaron a “caminar” y se acabaron la ciudad, siguieron con las
colonias y a recibir sugerencias de personajes típicos, tradiciones, etc.
Hoy estas tertulias tienen un formato muy especial. Se
programan mensualmente los temas. Los miércoles a las cinco de la tarde se
recibe a quienes llegan (la entrada es gratis), Se da una pequeña introducción
y se proyecta la calle o algunos datos generales sobre el tema. En varias ocasiones
se tiene invitado especial que desarrolla un tema y al final se da un espacio
para preguntas. La participación es respetuosa y se disiente y se aprende en un
ambiente de cordialidad pues se juega a ganar ganar. Lo único que se pide es
apertura, tolerancia y respeto.
No podemos ver los cambios y no notarlos o aprender de quien
lo vivió. Por ejemplo en la misma calle de Pepe Llanos donde está la biblioteca
municipal. Una sola calle. Llena de historias. Hablar del insurgente y
conspirador don José de los Llanos, que el pueblo la bautizó como la calle de
los “trasteros”; cuantas personas que pasaron alguna noche en las “arrecogidas”,
hoy biblioteca; a principios del siglo XVIII la manzana oriente de esta pequeña
calle fue parte de las “oficinas” administrativas de esta alcaldía; la cantina
que estaba en la esquina donde después fue la ferretería de don Fidel Muñoz; en
la otra esquina la Nueva España, la tienda de don Octavio García que atendía su
esposa María Luisa; la tienda de la mamá del Kika; la vinatería de los Pérez;
la farmacia del doctor Zúñiga; la carnicería de don Joel; aquel tiempo en que
se posesionaron de la calle los locatarios cuando les destruyeron su hermoso
Mercado, después el pleito para desalojar a la última frutería; la refaccionaria
de Periquín, el “Caballero de la noche”, la imagen de la Guadalupana que estaba
en la otra esquina; cuántas cosas, cuánta historia. Y sólo es una pequeña
calle.
Así son las Tertulias de la Biblioteca, historias, leyendas
urbanas, anécdotas. Desde un principio fue frecuentada por los extranjeros que
deseaban escuchar el español, pero cuando se les escucha preguntar interesados
en conocer nombres y datos nos damos cuenta de que también están buscando
conocer más el lugar que han elegido para vivir. No todos los extranjeros
merecen la diatriba que lanzaba don Genaro Almanza de: “fuereños advenedizos”
cuando algunos foráneos exigen comodidad, paz y bajos costos. Tristemente en
algunas ocasiones algunos están más interesados que los lugareños por no
consentir daños al patrimonio tangible o intangible.
La programación de este mes de abril fue: 5, Danzas Rituales
a cargo de la Arqueóloga Gabriela Zepeda; 12, Santo Entierro, tres siglos de
devoción sanmiguelense; 19, La Inquisición, el Antropólogo Juan Martín trae
ahora casos que sucedieron en la levítica villa; y 26, De Hortelanos a Locos,
el tercer intento que se hace por recuperar las danzas que originaron: el
Torito y los Hortelanos. Don Eusebio Luna vive aún y se insiste en buscar que
no se extinga esa danza tradicional. El gran problema es que se sigue perdiendo
la identidad, que preferimos lo nuevo, lo extranjero, lo llamativo; urge darnos
cuenta que necesitamos recuperar y/o fortalecer nuestras raíces.
Don Donato Almanza imaginero de abolengo, escritor de sus
recuerdos inyectó con su ejemplo a sus hijos quienes siguieron su modelo. Don
Genaro trataba con paciencia y cariño a sus discípulos porque su lema era: “aprendan
y enseñen; enseñen, enseñen que sólo estamos de paso”. Su casa fue una escuela
para aprender lo nuestro, su vida un ejemplo de integridad y trabajo en apoyo
para todo lo que oliera a pueblo. Sus obras un legado de destreza y habilidad:
el Señor de las Maravillas en el Oratorio, los Ángeles grandes del Santo
Entierro, el Señor de la Columna del Mercado Hidalgo y el Señor Ecce Homo de la
Procesión del Silencio de Celaya, etc. etc. a él le tocó restaurar varias
imágenes en Atotonilco, el Señor de la Columna entre ellas, confirmando que no
es de madera como generalmente se pensaba. Esto lo escuché precisamente de una
fuente primaria, Toño, pues él era aprendiz del arte que destilaba don Genaro,
padrino y maestro de muchos jóvenes, como Hermes Arroyo. Luis Antonio tiene
varias obras y entre sus restauraciones más conocidas está el haber intervenido
el mural del Calvario en el templo de San Juan de Dios, hace ya 25 años, cuando
el Padre Rey estuvo en aquella iglesia.
La Tertulia ha salido de su sede en varias ocasiones para
conocer In situ mucha historia: la
Cañada de la Virgen, la Cripta Parroquial, la Casa del “Pachón”, la Santa Casa,
etc. el número de asistentes varía en cada ocasión, pero uno de los asiduos
asistentes, Juan Araiza, sube a la red las tertulias, sígalas en:
www.smasite.com/tertulias pero si quiere pasar un rato agradable venga a Las
Tertulias, los miércoles a las 5 de la tarde donde encontrará a: doña Belén
Oviedo, doña Gloria Tovar, al Arq. Luis Gerardo Arellano, al escritor Samuel
Rangel, al maestro Nacho Chávez, al L.H. José Luis Rodríguez Gutiérrez, etc.
Este año está dedicado a la depresión un poderoso mal que
nos afecta y hay muchas formas de evitarlo: camine, lea, platique, etc. Toño y
Chucho son afortunados pues nunca irán al médico como lo hizo Garrick, de hecho
siguen ganando pues además de los conocimientos que se adquieren en cada sesión
han ganado un premio, se trajeron el primero lugar del concurso de Cuento
Infantil de la Zona Centro Occidente que integran: Zacatecas, Michoacán, San
Luis Potosí, Querétaro, Colima, Aguascalientes y Guanajuato. Felicidades, ya
que están haciendo lo que les gusta aplicando aquello de que: “si amas lo que
haces, nunca será un trabajo”.
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